un regalo de los dioses 

    chocolate (kakaw)


“Y así ellos estaban felices por las provisiones de la buena montaña, llena con cosas dulces, …llenas de pataxte y cacao…las ricas comidas llenaban la ciudadela llamada lugar roto, lugar del Agua Amarga” Popol Vuh 


Nativo de las Américas, el cacaotero se desarrolla a sombra de árboles más altos de la selva tropical. Nadie sabe quién cultivó el primer árbol, cuyo nombre deriva del vocablo maya kakaw. No obstante, hacia el año 1100 a.C. los primeros mayas habían aprendido a preparar un brebaje de cacao y, con el paso del tiempo, produjeron el primer chocolate caliente: bebida espesa y amarga utilizada particularmente en ritos de paso (nacimientos, matrimonio, inducción al sacerdocio, e incluso el tránsito al más allá). La receta maya original comenzaba con el secado, tostado y molido de semillas de cacao fermentadas, para luego mezclar el polvo resultante con agua y especias como canela, chile y vainilla. A continuación, vertían la mixtura varias veces de una vasija a otra hasta formar una capa de espuma, considerada la mejor parte de la fusión.

Muchas vasijas utilizadas para almacenar y servir el refrigerio muestran escenas de reyes , nobles y dioses en el acto de beber, y es posible que la plebe disfrutara del chocolate en días festivos, pues algunos recipientes fueron personalizados con grifos que anuncia: "este es mi pocillo de chocolate".

La exportación de cacao persistió aun tras el colapso de muchas ciudades mayas. Los aztecas eran importantes consumidores que valoraban las semillas tanto como los mayas, mas no podían cultivarlas debido al clima del centro de México. A finales del siglo XVI, los españoles comenzaron a exportar cargamentos de cacao a Europa y en 1847, el inglés Joseph fry desarrolló la golosina sólida que hoy deleita a millones en todos los rincones del mundo. (texto tomado de NATIONAL GEOGRAPHIC SOCIETY 2008)

Un gobernante prueba la temperatura de su chocolate en esta pintura del Clásico Tardío Maya, vaso del Petén; note los tamales, cubiertos con salsa de chocolate debajo de él.